miércoles, 15 de junio de 2011

El CUENTO GUSANO y EL ESCARABAJO


Un gusano y un escarabajo eran amigos y se pasaban charlando largas horas. El escarabajo estaba consciente de que su amigo el gusano era muy limitado en movilidad, tenía visión muy restringida y era muy tranquilo y pasivo comparado con los escarabajos.
El gusano, por su parte, estaba muy consciente de que su amigo el escarabajo venía de otro ambiente, y de que, en comparación con los gusanos de su especie, comía cosas desagradables, era muy acelerado, tenía una imagen grotesca y hablaba con mucha rapidez.
Un día, la compañera de vida del escarabajo le cuestionó a éste su amistad con el gusano, preguntándole cómo era posible que caminara tanto para ir al encuentro de un ser tan inferior, un ser tan limitado en sus movimientos… y por qué seguía siendo amigo de alguien que ni siquiera le devolvía los saludos efusivos que el escarabajo le hacía desde lejos.
Pero el escarabajo estaba consciente de que, debido a lo limitado de su visión, el gusano muchas veces ni siquiera veía que alguien lo saludaba y, si acaso llegaba a notarlo, no distinguía si era o no el escarabajo, y por ello no contestaba el saludo. Sin embargo, el escarabajo calló para no discutir con su compañera.
Fue tanta la insistencia de la escarabaja y tantos sus argumentos cuestionando la amistad que su compañero mantenía con el gusano que el escarabajo decidió poner a prueba esa amistad alejándose del gusano para esperar a que éste lo buscara.
Pasó el tiempo, y un día llegó la noticia de que el gusano estaba muriendo, pues su organismo se había resentido por los esfuerzos que cada día hacía para ir a ver a su amigo el escarabajo y, como no lo conseguía durante toda una jornada diurna, el gusano tenía que devolverse sobre sus pasos para pasar la noche en el refugio de su propia casa.
Al saber esto, el escarabajo, sin preguntar a su compañera, decidió ir a ver al gusano.
En el camino se cruzó con varios insectos que le contaron de las diarias e infructuosas peripecias del gusano para ir a ver a su amigo el escarabajo y averiguar qué le había pasado. Le contaron de cómo se exponía día a día para ir a buscarlo, pasando cerca del nido de los pájaros. De cómo sobrevivió al ataque de las hormigas y así sucesivamente.
Llegó el escarabajo hasta el árbol donde yacía el gusano esperando ya el momento final. Y al verlo a su lado, el gusano, apenas con un hilo de vida, le dijo al escarabajo cuánto le alegraba ver que se encontrara bien. Sonrió por última vez y se despidió de su amigo sabiendo que nada malo le había pasado a éste.
El escarabajo sintió vergüenza por haber permitido que las opiniones de otros minaran su amistad con el gusano y sintió dolor por haber perdido las muchas horas de regocijo que las pláticas con su amigo le proporcionaban y, sobre todo, por haberle puesto en una situación que le causó la muerte.
Al final entendió que el gusano, siendo tan diferente, tan limitado y tan distinto de lo que él era, era su amigo, a quien respetaba y quería porque, a pesar de pertenecer a otra especie, le había ofrecido su amistad.
Ese día aprendió varias lecciones, pero sobre todo que cuando pierdes un amigo, una parte de ti se va con él; las frases, los gestos, los temores, las alegrías, las ilusiones,… todo lo que compartisteis en el tiempo, se va con él.

jueves, 9 de junio de 2011

Cafes Coloquio Larruzz con IZASKUN IBABE

Viajar con Izaskun…
Izaskun Ibabe es una de esas mujeres, que sabe muy bien diferenciar la valentía y la temeridad. Ha recorrido medio mundo con su marido, que aunque no conozco; Rafa, el lunes pasado pude visionarle, cuando en la charla que Izaskun ofreció dentro de los Cafés Coloquio de Larruzz, titulada “Historia y Religión a través de los Viajes” nos relataba de manera anecdótica y con el rigor que da haber estudiado historia, pero sobre todo hacer y vivir las cosas con pasión y ganas.
Con detalle minucioso y fotografías realizadas por ella misma, nos montón en un avión, sin alas, de las ella conoce bien. Nos acomodo en los asientos de primera clase, pero no tuvimos que pagar nada, es mas… nos regalo momentos, estampas y testimonios que no tiene precio, como la historia de un funeral que puede celebrarse seis años después de haber muerto y llorar la familia como si hubiera sido ayer. Y digo esto, porque hasta que no tienen dinero suficiente para celebrar el responso, el muerto convive en la casa. Una vez reunido lo necesario para el festín; comida, bebida y resto de la celebración, despiden al difunto.
Ni Nieves Concostrina lo hubiera hecho mejor explicando las exequias.
Guarda con detalle y cotejado las notas que toma antes y después de los viajes, y pone a disposición de quien requiera, esos sitios y lugares donde estuvo y disfruto.
Ahora le he invitado a LaVisita, para que comparta todo aquello viajando y seguro que más adelante lo plasme en un Blog. Porque Izaskun es… Izaskun, es sensible, de costumbres sencillas y se la nota que disfruta de las cosas, mejor dicho, disfruta de las pequeñas cosas. Y con 30 $ Dólares, al día para “su” Rafa y ella, se arreglan en cualquier lugar del mundo.
Después de dejar África su continente preferido a la derecha, seguimos rumbo por Asia, para unos minutos mas allá, llegar hasta América… fascinante el viaje donde a todos nos dejo boquiabiertos. El pasaje, completo por cierto, hubo gente que se tuvo que subir la silla, perdón, el asiento de la zona de abajo, ansioso de mas, preguntaba y repreguntaba a una Izaskun emocionada y emocionante. Recibió varias veces los aplausos de los viajeros que no querían abandonar el avión…Izaskun sabe mucho de aviones, pero más de esos que se hacen ingenuamente doblando papeles y lanzando peina el aire, ese que respiramos para vivir.
Gracias Izaskun por invitarme a este viaje. Gracias
www.jabiercalle.com